INTISI ofereix aquest article sobre els teixits tècnics aplicats a les cortines tallafocs per tal de limitar propagació dels incendis en els edificis


Los llamados textiles técnicos o textiles de uso técnico (TUT), como muchos productos e innovaciones, deben su rápido desarrollo a la industria aeroespacial y militar, que llevan décadas invirtiendo en la búsqueda de soluciones para hacer frente a diversos problemas, entre otros las condiciones ambientales extremas.

El gran número de posibilidades que ofrecen los textiles de uso técnico ha supuesto un importante salto cualitativo en muchos sectores. Los tejidos no servían únicamente para vestir a las personas, sino que proporcionaban otros variados usos. Los denominados “geotextiles”, ampliamente utilizados en la industria civil, son un buen referente de ellos. Podríamos definirlos como aquellos concebidos para un uso o aplicación específica donde se requiere unas propiedades técnicas exigentes concretas, como por ejemplo resistencia mecánica, resistencia térmica, resistencia a los rayos UV o IR, aislamiento, etc.

La tecnología textil ha sido adoptada por el sector de protección contra incendios para crear nuevos sistemas que limitan la propagación de los incendios en los edificios con las cada vez más conocidas cortinas cortafuegos.

Los tejidos técnicos que conforman las cortinas cortafuegos están compuestos de fibras minerales de vidrio ya que su principal característica es que su resistencia al fuego permanece inalterable con el paso del tiempo y la afectación del fuego.

La principal característica de los tejidos de fibra de vidrio es que sus propiedades ignífugas residen en las materias de su composición y no dependen en ningún caso de un acabado o tratamiento especial de proceso; lo que significa que se teje directamente con hilos compuesto de fibras de vidrio (ya ignífugas), por lo que sus propiedades son inherentes desde su materia prima.

Aplicando adecuadamente métodos de tejer específicos e integrando elementos que refuerzan las prestaciones requeridas mediante un estudiado diseño funcional, se consiguen productos que permiten cumplir con las distintas capacidades de resistencia al fuego tipificados por la norma UNE-EN 13501-2:

CLASIFICACIÓN AL FUEGO PRESTACIÓN TECNOLOGÍA TEXTIL IDÓNEA PARA CUMPLIR LA PRESTACIÓN
INTEGRIDAD “E” Capacidad que tiene un elemento compartimentador de soportar la exposición al fuego solamente en una cara, sin que exista transmisión del fuego a la cara no expuesta debido al paso de las llamas o de gases calientes. Tejido técnico de fibra de vidrio con armadura de acero inoxidable para evitar durante un tiempo determinado la aparición de:

– Grietas o aberturas que superen las dimensiones establecidas,

– Llamas en la cara no expuesta.

El textil incorpora un acabado con un tratamiento de poliuretano para preservar inherentes las propiedades del tejido durante las maniobras de la cortina cortafuegos.

AISLAMIENTO TÉRMICO “I” Capacidad de un elemento compartimentador de soportar la exposición al fuego en un solo lado, sin que se produzca la transmisión del incendio debido a una transferencia de calor significativa desde el lado expuesto al no expuesto. A día de hoy no existe un elemento textil que por sí solo ofrezca esta prestación, por lo que se integra a la cortina cortafuego un sistema de irrigación a fin de evitar que se produzca la ignición de:

– La superficie no expuesta al fuego,

– Cualquier material situado en la proximidad a esa superficie.

Y constituir una barrera suficiente para proteger a las personas próximas a la cortina del calor del incendio.

RADIACIÓN “W” Capacidad del elemento compartimentador de soportar la exposición al fuego en una sola cara de forma que se reduzca la posibilidad de transmisión de fuego debida a una radiación significativa de calor (≤15kW/m2) a través del elemento, o bien desde la cara no expuesta a los materiales adyacentes. Tejido multicapa formado por fibra de vidrio reforzado con armadura de acero inoxidable con acabado con láminas de aluminio en ambas caras capaz de crear una capa interior aislante cuando se expone a altas temperaturas, y reflejar la energía calorífica limitando así la transmisión de radiación térmica por debajo de los 15kW/m2 durante un tiempo determinado.