El pasado viernes, 31 de enero de 2020, se celebró en el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) la asamblea general de socios con un alto número de representantes de las empresas asociadas y otros acompañantes.

Más de cuarenta asistentes que pudieron conocer de primera mano los objetivos y nuevos retos que el CLÚSIC quiere encarar este 2020.

En la bienvenida nos acompañó Joan Josep Pintado, director de seguridad del MNAC que, junto con el presidente del CLÚSIC, Elías López, dirigieron unas palabras de bienvenida a todos los presentes.

El orden del día de la asamblea, incluía el plan de actuación y presupuesto para este año que fue aprobado por unanimidad. Seguidamente todos los asociados pudieron debatir ampliamente sobre el futuro y las posibilidades del CLÚSIC. Fue un debate muy productivo y se propusieron estrategias muy interesantes. Tal y como comentó el presidente, es muy importante que el CLÚSIC continúe siendo una asociación con una alta participación y implicación de sus asociados, por eso mostró su satisfacción por el gran número de asistentes reunidos y las aportaciones que hicieron y hacen en el día a día de la entidad.

Seguidamente, todos los presentes pudieron disfrutar de un espléndido almuerzo, cortesía del CLÚSIC, en el restaurante Òleum en el mismo MNAC. Fue uno de los momentos para hacer sinergias y networking entre los socios y pudieron disfrutar de unas vistas magníficas acompañados de amigos y colaboradores.

Después de comer, nos dividimos en dos grupos y visitamos diferentes espacios del MNAC acompañados por Joan Josep Pintado y Josep Maria Vargas del Departamento de Seguridad del Museo.

Nos mostraron diversos espacios, como la Sala del Románico que contiene, como es bien sabido, la mejor representación de Arte Románico del Mundo (siglo XI-XIII). Allí pudimos conocer de primera mano las medidas de seguridad, desde la conservación hasta la seguridad física, que deben tener las joyas artísticas que contiene el espacio. Al mismo tiempo que disfrutábamos del excepcional conjunto de pinturas murales y pinturas sobre tabla (el más numeroso y antiguo de Europa) esculturas y tallas de piedra y madera, etc.

Seguidamente, pudimos visitar algunas salas de reservas y constatamos la enorme colección artística que está depositada en el Museo Nacional. Estamos hablando de más de 300.000 obras, de las cuales, únicamente unas cuatro mil están expuestas de manera permanente. El valor de las colecciones es incalculable. La conservación de este patrimonio es compleja, dada la diversidad de soportes y la diversidad de épocas y técnicas utilizadas en cada una de las piezas. Cuestiones como el control de la temperatura, el grado de humedad, el control de plagas, las medidas de extinción en caso de incendio, etc. deben estar calculadas al detalle para garantizar que el legado llega en buenas condiciones a las futuras generaciones.

Así pues, pasado y presente se conjugan para garantizar el futuro del edificio y lo que el edificio contiene. El edificio fue construido con motivo de la Exposición Universal de 1929 y debía ser derribado, una vez acabada la Expo. Afortunadamente, el edificio se mantuvo y se convirtió en lo que podemos visitar hoy, pero fueron necesarias una serie de medidas para garantizar la estabilidad y la seguridad, como dotarlo de cimientos. Nuestros anfitriones nos mostraron las galerías que se construyeron en este momento y en las que pudimos ver el laberinto de ingeniería al servicio del Museo: canalizaciones inmensas, motores de gran envergadura, bombas imponentes al servicio de un edificio que está al servicio del público para mostrar y dar a conocer la mejor expresión artística de nuestro país.

Comprender nuestro patrimonio nos ayuda a entender quiénes somos y cómo hemos llegado hasta aquí, es una parte fundamental de nuestra identidad como personas y como sociedad, por ello la tarea que efectúa el MNAC para conservarlo y protegerlo es de una importancia vital. Las medidas de seguridad en todos los ámbitos, también en cuanto a los incendios, son imprescindibles tanto a nivel humano como a nivel patrimonial.

Desde el CLÚSIC, agradecemos al Departamento de Seguridad del MNAC, su cortesía y las explicaciones tan precisas que nos dedicaron en todo momento.