Ciclo de entrevistas
Quién es quién en el Clúster de Seguridad Contra Incendios
Javier Arilla
El CLÚSIC nos aporta un entorno completo y cercano de la protección contra incendios, tener un espacio en el que comprender y entender el ecosistema completo de la PCI
Háblanos un poco de ti, quién eres, tu formación y metas profesionales que quieras destacar.
Mi nombre es Javier Arilla, soy ingeniero electrónico reconvertido al mundo del PCI y, más específicamente, a la señalización de seguridad a través del Máster en prevención de riesgos laborales que cursé cuando acabé mis estudios universitarios.
Mis orígenes laborales empiezan en el mundo de la Calidad y de la Prevención de Riesgos Laborales, donde obtengo esa visión transversal necesaria para poder afrontar los problemas o las situaciones a solventar de un modo global y no específico. Actualmente, desempeño funciones de dirección técnica comercial en IMPLASER, fabricante de señalización de seguridad y, desde aquí, formo parte activa en los Comités Técnicos de Normalización (CTN 23) en los que se desarrollan las normas propias de la señalización de seguridad y del Comité de Certificación de producto de AENOR (CTC 11)
¿Cuál es la actividad principal de la entidad en la que trabajas y qué te gustaría destacar?
IMPLASER es fabricante nacional de SEÑALIZACIÓN. Sobre este nombre, trabajamos para poder ponerle el apellido que sea necesario, señalización DE SEGURIDAD FOTOLUMINISCENTE, señalización DE SEGURIDAD ELECTRICA / FOTOLUMINISCENTE, señalización DE SEGURIDAD LABORAL, señalización DE ENTORNOS ACCESIBLES, señalización DE IMAGEN DE MARCA … Es decir, si algo caracteriza a IMPLASER es su dinamicidad y adaptación al cliente para poder ir cubriendo las distintas necesidades que este le plantee, eso sí, siempre desde la profesionalidad y la calidad de los productos por bandera.
¿Cuáles son los objetivos empresariales que tiene definidos para los próximos años?
En los tiempos que nos está tocando vivir, viniendo de una pandemia sanitaria mundial de más de dos años, acompañada en su parte final y actual de una crisis de suministro de materiales con la consiguiente subida de precios indiscriminada de todo tipo: materias primas, energía, combustibles… y, actualmente, con una inflación de más de un 10%, plantear unos objetivos para los próximos años parece, al menos, arriesgado. Aun así, visualizamos nuestros horizontes con la integración de técnicas y sistemas de señalización, desde donde poder atacar proyectos integrales de señalización de espacios, comunicándonos con el edificio y con los usuarios de este.
¿Cuánto tiempo lleva asociados al CLÚSIC y a qué grupos de trabajo participáis? ¿Recuerdas qué les motivó a asociarse?
IMPLASER forma parte del CLÚSIC desde 2018, y nuestra participación en los grupos de trabajo es variable y vamos entrando y saliendo en los que consideramos que podemos llegar a aportar valor. Por otra parte, participamos en la parte formativa del CLÚSIC, con un profesor en los cursos oficiales de habilitación de operarios en sistemas de señalización fotoluminiscente según el RIPCI.
La promoción de la seguridad en materia de protección contra incendios está dentro de nuestra filosofía de trabajo, y tenemos la convicción que una buena cultura y formación en PCI interesa a todos los agentes involucrados en la misma.
¿Qué le aporta el CLÚSIC como empresa? ¿Y su empresa en el CLÚSIC?
Como empresa, el CLÚSIC nos aporta un entorno completo y cercano de la protección contra incendios, tener un espacio en el que comprender y entender el ecosistema completo de la PCI, para conseguir esa vista global del sector, y saber dónde, nosotros como fabricantes de señalización, podemos aportar más.
Nosotros podemos aportar al CLÚSIC esa visión del fabricante y la especialización técnica en materia de señalización de seguridad necesaria para poder visualizar el ecosistema completo y la integración con el usuario final de los edificios.
¿Dónde crees que el sector de la seguridad contra incendios tiene mayor margen de mejora?
En asegurar la calidad final de producto y la instalación realizada. Desafortunadamente, partimos de una legislación de mínimos en materia de PCI. Por eso, por un lado, es necesaria la existencia, sí o sí, de todos los elementos propios del sector, pero, por otro lado, si se va a mínimos, se obvia la importancia que tienen los productos en caso de siniestro. La imposición sin una cultura sólida en la prevención de incendios hace que los productos de mínimos afloren por doquier, para cubrir el expediente legal sin que, en ocasiones, se plantee su veracidad técnica. En muchas ocasiones prevalece un análisis económico frío de “el más barato”, en lugar de un análisis de “el más fiable” o “el más adecuado” que, en muchas ocasiones, no dista tanto del precio de “el más barato”.
Por eso es tan importante la profesionalización del sector y asegurar que todo el mundo tiene plena conciencia y conocimiento de lo que está haciendo. Nosotros, desde 2004, venimos aportando nuestro pequeño granito de arena, proporcionando cursos de formación sobre señalización de seguridad fotoluminiscente, y aportando soluciones técnicas en forma de aplicaciones informáticas para la generación de planos de sistemas de señalización.
¿Cuáles crees que son los retos más importantes que el sector de la seguridad contra incendios tiene por delante?
Yo puedo hablar más de la parte de señalización que del resto. Se acaban de abordar dos de las tres normas principales que atañen a la señalización de seguridad fotoluminiscente (UNE 23033 y UNE23034, que versan sobre los tamaños, colores y pictogramas de las señales), pero todavía queda por revisar y actualizar la norma que trata de fotoluminiscencia, la UNE 23035, cuya versión actual tiene ya más de 15 años. El tema del uso de los elementos híbridos (eléctricos y fotoluminiscentes), así como el tema de dotar de dinamicidad a un sistema estático como es el de la señalización de seguridad fotoluminiscente, son retos que ya se tienen planteados y donde actualmente se está trabajando para conseguir una integración final total con el resto de los sistemas de PCI.