CISA nos habla de la importancia de los perfiles ambientales de las empresas y por extensión de las certificaciones ambientales de los productos.

 

Declaración ambiental de producto. Colaboración para la construcción ecológica.

Los perfiles ambientales de las empresas y por extensión las certificaciones ambientales de producto son principios cada vez más importantes tanto para las empresas productoras como para sus clientes o los consumidores.

Además de facilitar información importante sobre el ciclo de vida de un producto, también permite mejorar la imagen corporativa de las empresas, transparencia en sus procesos o su compromiso con el medio ambiente.

Bajo la normativa ISO 14020 “Etiquetas y Declaraciones Ambientales” (de cumplimiento voluntario) con la cual se le proporciona a los compradores información sobre el proceso de fabricación de un producto o los efectos ambientales que genera su consumo existen otros tres tipos de normas ISO para definir tres tipos de etiquetado ambiental de un producto, todos ellos voluntarios:

 

  • Tipo I. Etiquetas verdes ISO 14024 (ECOetiquetas), verificados por una entidad externa que comprueba los requisitos necesarios para considerarlo ecológico.

 

  • Tipo II. Auto declaraciones ambientales ISO 14021, las etiquetas de este tipo permiten considerarlos ecológicos. Validada por el propio fabricante del producto sin intervención de una entidad externa.

 

  • Tipo III. Declaración Ambiental de un Producto (EPD) ISO 14025. De todas, es la de mayor credibilidad y la más completa, en la que se describe de forma objetiva el impacto ambiental de un producto a lo largo de TODO su ciclo de vida, desde su proceso de creación hasta su disposición final.

 

Por lo tanto una EPD es una Declaración Ambiental de Producto certificada y con criterio unificado, que aporta información sobre los datos ambientales de ciclo de vida de un producto o servicio. Esta etiqueta es muy apreciada por los consumidores, pues pueden comparar con el mismo criterio productos similares de diferentes marcas.

Un ejemplo muy conocido es la etiqueta energética europea, que mediante letras indica la eficiencia energética de un producto.

Existen cinco pasos definidos y normalizados para realizar un EPD y son los siguientes:

  1. Seleccionar las Reglas de Categoría del Producto (PCR) del producto en cuestión.
  2. Realizar un Análisis del Ciclo de vida (LCA).
  3. Recoger la información resultante en formato unificado EPD.
  4. Verificar la información por medio de un laboratorio o entidad acreditada.
  5. Registro y publicación de EPD.

También dentro del sector de los fabricantes de herrajes para puertas cortafuego, como cerraduras, manillas, cierrapuertas o antipánicos, se ha decidido firmemente emprender este trabajo de alcance europeo.

Actualmente existen 14 categorías de EPD y en el caso de las relativas a los productos y soluciones CISA-Allegion son:

  •       Manillas para puertas y ventanas
  •       Cierrapuertas
  •       Cerraduras
  •       Cilindros
  •       Candados
  •       Dispositivos antipánico

Con ello como empresa vinculada al sector de la protección contra incendios, nos aseguramos el poder aportar productos certificados, ensayados, con trazabilidad y también con sello EPD para cualquier tipo de edificación, sin perder de vista la colaboración con fabricantes de puertas, para que el producto final de la unión de puerta+herraje, instalado en cualquier edificio cumpla al máximo con los requisitos de productos sostenibles.