Articulo de DETNOV que nos habla de soluciones para una mejor eficiencia energética en el marco de las Smart Cities.

El concepto “Smart City”, cada día, está tomando más fuerza. Todos queremos que nuestras ciudades y pueblos sean un lugar donde vivir mejor. Por definición una «ciudad inteligente» también conocida como «ciudad eficiente» o «ciudad súper-eficiente», se refiere a un tipo de desarrollo urbano basado en la sostenibilidad que es capaz de responder adecuadamente a las necesidades básicas de instituciones, empresas y de los propios habitantes, tanto en el plano económico, como en los aspectos operativos, sociales y ambientales.

 

Uno de los aspectos donde hace más hincapié el concepto “Smart” es la eficiencia energética. El coste de la producción de energía ha aumentado considerablemente, lo cual, nos repercute en las facturas de suministros eléctricos. La instalación de las centrales Detnov serie CMD-50X nos ayudan a minimizar dicho ahorro energético.

 

Eficiencia energética

En cualquier aparcamiento, uno de los factores que más influyen en el incremento de la factura del suministro eléctrico son los extractores de ventilación, los cuales, se activan cuando la concentración de monóxido de carbono es demasiado elevada. Poder conseguir que los motores de dichos extractores actúen proporcionalmente a la concentración de gas es esencial para conseguir un ahorro importante.

La gran mayoría de centrales de detección de monóxido se conectan a los extractores mediante una o varias salidas de relé (todo o nada). Esto significa que el motor de esos extractores entra en funcionamiento de forma no gradual provocando, por un lado, que funcione a máxima potencia  y, por otro, un pico de consumo elevado.

El arranque de los extractores de una manera inesperada, además, conlleva molestias de ruido y vibraciones a todos aquellos vecinos que viven en las primeras plantas de los edificios situados encima del aparcamiento.

La vida útil del motor es un factor primordial a tener en cuenta cuando hablamos de eficiencia y los sobreesfuerzos, exigidos en el proceso de la extracción, provocan que su vida sea vea reducida de forma drástica debido al alto rendimiento requerido durante largos periodos de tiempo.

Por tanto, para conseguir una eficiencia es importante que la central de monóxido tenga la posibilidad de regular de forma inteligente las revoluciones del motor en función de la concentración real en ppm de monóxido dentro del aparcamiento. Esta regulación se realiza mediante una conexión de salida analógica de la central a un variador de frecuencia estándar. A mayor concentración monóxido mayor potencia será generada para una extracción más rápida y eficiente.

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Vida útil de los detectores

En la actualidad, la tecnología de detección que usan la mayoría de los fabricantes de detectores de monóxido se basa en células electroquímicas. Esta tecnología permite una vida útil del detector de aproximadamente 5 años; en ambientes muy sucios esta vida se verá reducida. Dicha vida útil puede variar según el fabricante, en las fichas técnicas de los proveedores aparece dicha información. Anteriormente las células eran de tipo semiconductor, el tiempo de respuesta y calibración eran superiores a los de la tecnología actual y su vida útil era más corta (alrededor de los 4 años).

Los detectores con el tiempo van perdiendo capacidad de detección. Esto es debido a que la célula se va impregnando de partículas de monóxido, lo cual, ocasiona que el umbral de detección se vea más reducido y, por tanto, aumenten de forma drástica los disparos de extracción. Por eso, es importante renovar el parque instalado una vez haya finalizada su vida útil.

 

Eliminación de falsas alarmas

Una gran parte de los arranques de la extracción son debidos a falsas alarmas ocasionadas por concentraciones de monóxido originadas por algún vehículo ocasional (mala combustión de vehículos viejos o los que llevan un periodo largo de tiempo sin moverse). Asimismo aquellas circunstancias como tener el motor durante un buen rato en marcha dentro del aparcamiento (porque hemos recibido un mensaje en el teléfono móvil y nos ponemos a contestar sin parar el motor del vehículo), origina un concentración irreal de monóxido en esa zona.

Para poder eliminar estas incidencias, en vez de realizar el análisis de manera puntual, es importante el realizar la media real entre todos los detectores de una misma zona y, en el caso que varios detectores tengan una lectura elevada de concentración de monóxido entonces, por seguridad, se procederá a la extracción al instante.

Integración de sistemas

Una gestión centralizada del aparcamiento hace posible una interacción entre todos los sistemas instalados (detección de incendios, CCTV, seguridad, ventilación, iluminación, etc.). Esto nos permite, en mayor medida, un ahorro en el tiempo de respuesta a las posibles incidencias incrementando así el  nivel de seguridad de la instalación. Además, el poner toda la información de los sistemas en una única plataforma de visualización permite al personal de seguridad, mantenimiento y gestión una mejora en sus procedimientos, por tanto la conectividad de la central de detección de monóxido dentro de esta hace que sea un aspecto fundamental para la gestión integral del aparcamiento.

Asimismo, el poder obtener a tiempo real la temperatura en cada detector nos ayuda a proceder de forma manual o automática la renovación del aire para cumplir las exigencias respiratorias y de bienestar recomendadas, obteniendo así, un mayor confort durante nuestra estancia en el aparcamiento.

 

Detector compacto de monóxido de carbono

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Les mostramos el detector de monóxido de carbono modelo DMDP-500. Incorpora sensor con tecnología de célula electroquímica y algoritmos de cálculo, los cuales, proporcionan gran fiabilidad y precisión en la detección, alcanzando una resolución de 1 ppm en un tiempo inferior a 10 segundos.

Las principales ventajas del modelo compacto es su grado de protección. Está fabricado en una caja de gran resistencia, lo que le permite ser más robusto que los detectores estándar del mercado. Puede resistir los impactos originados por los usuarios del aparcamiento, como por ejemplo la apertura de la puerta del vehículo o golpes involuntarios de bolsas o paquetes cuando la persona va cargada. A nivel de mantenimiento el detector dispone de un grado de protección IP elevado protegiéndolo del agua cuando se está limpiando el aparcamiento. El detector se instala en la pared o en la columna del aparcamiento mediante tornillos, de esta manera el detector no se puede arrancar o sustraer de una manera sencilla, protegiéndolo de posibles hurtos.

Dichos detectores son compatibles con las centrales de detección de monóxido Detnov serie CMD-50X, cuya conexión es a 2 hilos hasta 32 detectores en cada zona. La instalación es sin polaridad mejorando así el tiempo de puesta en marcha; además se puede hacer la instalación en estrella ya que, al poner la central en marcha, los detectores se direccionan automáticamente.